Nueva realidad

 Por supuesto que hay casos y casos. Pero en la gran mayoria de familias que he conocido, en mi generación, el padre con respecto al hijo varón, hacía el papel de Pepito Grillo, recordándole que siempre hay cosas que mejorar. Y su problema es que ese papel no siempre se ha ejercido con cariño, sino con cierto enfrentamiento. Quizá debido a la otra parte de la ecuación: la madre. Ella más bien ha ejercido el papel de manta protectora, tapando y limpiando los errores del hijo. Me parece que es muy difícil querer a un hijo y corregirle a la vez, sin caer en la sumisión o el enfrentamiento.

Con respecto a las hijas, el papel ha sido diferente. Mientras que el padre ha intentado protegerla y en muchos casos empujarla a realizarse, la madre ha solido descargar en ella labores de casa, sin preocuparse demasiado en su realización personal. Es curioso pero quizá normal, pensando en que quien podría el dia de mañana ocuparse de cuidar a los padres, seria normalmente la hija.

Todo esto son cosas que hoy en dia pueden cambir en cierto grado y no para bien en todos los casos. Los hijos (e hijas) cada vez se desligan más de sus padres. Esto viene dado por una sociedad conformista y básicamente vaga. El esfuerzo no se motiva. Más bien el pasarlo lo mejor posible. Todos tenemos derechos pero nadie quiere hablar de las obligaciones. ¿Acaso alguien sensato piensa que lo que tenemos ha sido siempre nuestro? La tecnología, las leyes, las normas de buen comportamiento, la vida en sociedad. Todo eso ha costado mucho esfuerzo y mucha sangre. Y pienso que lo estamos perdiendo.

La social democracia (aparte del hecho de que se ha basado en el colonianismo y el abuso sobre el tercer mundo) es un logro básicamente auropeo. No es el capitalismo que impera en EEUU. No es el psudo-comunismo que impera en Rusia y no es capital-comunismo de china. La protección de los demás es la base de nuestra sociedad. 

En los años 60, la invasión de la cultura inglesa, que yo he conocido, nos quitó mucha caspa y nos hizo más abiertos a nuevas ideas. En los 90 comenzó la invasión norteamericana, con su simpleza y egoismo. La caida del muro de Berlin empujó al populismo y, al mismo tiempo, la extrema derecha renació fuertemente, como lógica consecuencia de dicha caida. Y así llegamos a la crisis provocada de 2007. Ese fué el golpe de gracia a la social-democracia.

Todo esto es el caldo en que las nuevas generaciones van creciendo. Unas generaciones cada vez más intransigentes, un caldo en el que machismo y  feminismo viven una guerra que tapa la verdadera lucha: la social.

Esperemos que poco a poco las aguas vuelvan a su cauce y la sociedad reaccione dando un nuevo empuje a una clase media potente. La opción se llama tercera guerra mundial. Muchos no la descartan. Eso es lo malo.